|
|
Hasta su nombramiento en mayo de 2009, el actual Consejero de Industria, Innovación, Comercio y Turismo, Bernabé Unda, había desarrollado su carrera profesional en el ámbito de los astilleros públicos. Comenzó en La Naval de Sestao (Vizcaya), donde estuvo dos décadas hasta acabar como director general.
Finalizó su labor en el astillero cuando éste se privatizó en 2005, un proceso en el que Unda participó activamente. Nacido en Bilbao e ingeniero naval de profesión, desde 2005 hasta su incorporación a la esfera política, el Consejero ocupó la Dirección General Industrial de Navantia, el grupo público de astilleros españoles, en el que se integraron las factorías de Ferrol, Cádiz y Cartagena.
|
.....................................................................................................................................................................................
¿Cuáles piensa que serán las principales lecciones a extraer de la situación de crisis que vivimos?, ¿Y en qué medida opina que lo aprendido transformará nuestro actual modelo productivo?
Hay muchas lecciones. Por un lado, en cuanto se manifiesta un problema de estas características hay que reconocerlo y atacarlo. Y si algo nos ha quedado claro con esta crisis, es que la internacionalización ayuda a las empresas a transitar por la crisis en condiciones mucho más favorables. Es un aspecto en el que estamos incidiendo mucho desde el Gobierno, queremos ayudar a las empresas a que se internacionalicen, que engan un mayor peso en los mercados exteriores. Y, por supuesto, nunca hay que dejar de hacer un esfuerzo por mejorar la competitividad a través de la innovación y la calidad. Para trabajar en las dos vertientes –resistir ante la crisis y estar preparados para competir cuando hayamos salido de ella-, el Dpto. de Industria, Innovación , Comercio y Turismo tiene a disposición de las empresas distintos programas. Queremos ayudar, a través de la estrategia Compite, a que aquellas empresas que estén en la necesidad de transformarse y buscar nuevos mercados puedan hacerlo en las mejores condiciones.
¿De qué factores diría que depende la supervivencia de nuestro tejido empresarial y qué tipo de empresas piensa que saldrán adelante con capacidad para liderar la evolución hacia nuevos escenarios?
Hay siete pilares básicos, como son: la innovación, la capacidad emprendedora, la diversificación, el desarrollo de las personas y las organizaciones, la internacionalización, la dimensión y la sostenibilidad medioambiental y ética. Son los siete ejes sobre los que se sustentará el Plan de Competitividad que presentaremos en verano. En Euskadi tenemos un tejido empresarial sólido, que está preparado para afrontar el futuro en esas líneas maestras. Se necesita esfuerzo y talento. Se está gestando un cambio de modelo económico, y tenemos que adaptarnos a él. Es el gran reto de nuestras empresas. Como ejemplo, contamos con una gran Red de Ciencia y Tecnología, y es una obligación acercarla a todo el tejido productivo vasco, tanto a las grandes empresas como a las pequeñas.
¿A qué grado de presencia cree que debe aspirar el tejido empresarial vasco en el ámbito internacional?
Ése, como he indicado, es uno de nuestros grandes desafíos. No sólo hay que aspirar a profundizar en nuestra apertura al exterior a través de la entrada en nuevos mercados. Quiero decir que no sólo hay que vender más en el exterior. También debemos ser atractivos a la inversión extranjera, un capítulo en el que tenemos mucho recorrido por delante.
Ha dicho en alguna ocasión que la innovación y el conocimiento son los eslabones de la cadena productiva donde se genera más valor añadido, ¿qué protagonismo otorga a los Centros Tecnológicos en la generación de ambos elementos?
Los Centros Tecnológicos -no lo digo ahora sino que llevo defendiéndolo desde que accedí al cargo- tienen un papel fundamental. Son piezas clave de nuestra Red de Ciencia y Tecnología, y la base de esa aspiración hacia una mayor competitividad. La innovación y la calidad son el principal medio para crear más riqueza. Es imprescindible un uso creativo del conocimiento, para ofrecer soluciones novedosas, prácticas, eficientes. En el País Vasco tenemos una oferta brillante por parte de los Centros Tecnológicos, que deben saber aprovechar nuestro tejido empresarial.
¿Qué papel diría que deben desempeñar el resto de agentes del sistema en esta generación de innovación y conocimiento; CICs y Unidades de I+D empresariales, principalmente?
Es importante que desde la posición de cada uno seamos capaces de articular una ‘cadena de conocimiento’ que nos permita trabajar de manera más coordinada e integrada, y orientar nuestra capacidad de I+D+i hacia las necesidades de las empresas, desde los departamentos universitarios que par ticipan en los programas de I+D industriales, hasta las propias unidades de I+D empresariales.
Cada uno de los agentes no debe funcionar aisladamente y no debe considerarse en ningún caso como un fin en sí mismo. Todos y cada uno de ellos nos hacen más y más fuertes en el camino de aportar soluciones competitivas para la necesaria renovación permanente de nuestras empresas. Ése es el papel, el de cada uno, que se integra en el papel del colectivo de agentes de la RVCTI como una herramienta eficaz y bien engrasada al servicio de nuestras empresas.
¿Cuál es el reto más destacable que aspira conseguir para el actual sistema vasco de innovación?
Tras unos periodos muy enfocados a la creación o el impulso de distintos tipos de agentes, Centros Tecnológicos, CIC’s, Unidades de I+D Empresariales, Corporaciones y Alianzas Tecnológicas, Entidades Intermedias de Innovación…, estamos ante el reto de ‘ordenar el sistema’. La revisión del Decreto de la Red Vasca de Ciencia Tecnología e Innovación será sin duda uno de los principales cometidos que tendremos en los próximos meses. Tras ello, debemos afrontar un nuevo Plan de Ciencia Tecnología e Innovación que nos proyecte al año 2015 y que nos permita hacer el mayor y mejor uso de nuestro sistema de innovación. La convergencia de tecnologías y el ya mencionado trabajo coordinado e integrado entre agentes de la ‘cadena del conocimiento’ serán algunas de las claves y de los retos del nuevo PCTI.